Una reciente encuesta realizada por la Asociación para el Avance de la Inteligencia Artificial (AAAI) a 475 expertos en inteligencia artificial (IA) de todo el mundo ha revelado que el 76% considera «muy improbable» o «improbable» que las técnicas actuales logren alcanzar una inteligencia artificial general (AGI), equiparable a la humana. A pesar del auge de la IA y los impresionantes avances recientes como los modelos Maverick de Meta, muchos expertos sostienen que simplemente escalar los modelos existentes no será suficiente.
Científicos como Nuria Oliver señalan que aún estamos muy lejos de una IA con autoconciencia y complejidad humana. Otros, como Senén Barro, comparan la AGI con llevar humanos a Marte: es un objetivo lejano sin un camino claro. Además, expertos como Carme Torras y Carles Sierra destacan la importancia de integrar cuerpo, percepción y razonamiento simbólico para avanzar hacia una AGI real. El debate refleja una creciente conciencia sobre las limitaciones de las aproximaciones actuales y la necesidad de nuevas estrategias para alcanzar una inteligencia verdaderamente general.
En cambio, ciertas figuras influyentes de la industria tecnológica sostienen una visión más positiva sobre el porvenir de la AGI. Demis Hassabis, director ejecutivo de DeepMind, ha indicado que podríamos presenciar una AGI operativa dentro de cinco a diez años. Mientras tanto, Elon Musk ha declarado que la inteligencia artificial podría superar a la humana hacia finales de 2025, considerando el acelerado avance de la capacidad computacional y el financiamiento en el sector.
Yann LeCun, jefe científico de IA en Meta, ha expresado que los modelos actuales, como los grandes modelos de lenguaje (LLMs), tienen limitaciones significativas, incluyendo la falta de comprensión del mundo físico, memoria persistente y capacidades de razonamiento. LeCun predice que en los próximos cinco años veremos una transformación radical en la arquitectura de la IA, con sistemas que incorporen sentido común y una comprensión más profunda del entorno.
Durante este tiempo, el Centro de Investigación e Innovación Biomédica de Cádiz (INiBICA) ha iniciado el empleo de técnicas de IA generativa en el ámbito de la investigación biomédica, alcanzando progresos relevantes en la detección temprana y tratamientos a medida. La IA generativa proporciona una exactitud excepcional y una habilidad de aprendizaje constante, aunque se destaca la importancia de la supervisión profesional en su aplicación.