El Congreso de Colombia rechazó este lunes, por segunda vez, la reforma política presentada por el gobierno del presidente Gustavo Petro. La iniciativa, que buscaba transformar las reglas del sistema electoral y limitar el financiamiento privado en las campañas, no logró ser discutida en el cuarto debate debido a la falta de quórum, lo que representa un nuevo revés para el gobierno en sus intentos de impulsar reformas estructurales.
La reforma, al tratarse de una enmienda constitucional, debía ser aprobada en cuatro debates antes de que concluyeran las sesiones ordinarias del Congreso, que finalizaron el lunes. Al no cumplirse este requisito, el proyecto quedó archivado, sumándose a una serie de derrotas recientes del Ejecutivo, incluido el rechazo a la reforma fiscal que buscaba garantizar el financiamiento del presupuesto estatal para 2025.
El ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, expresó su descontento tras el fracaso de la reforma política, señalando que el Congreso, específicamente la junta directiva del Senado, asfixió una iniciativa que consideraba clave para el país. “Me parece que es lamentable lo que pasó, porque prácticamente mataron por asfixia una reforma política que es absolutamente imprescindible para el país”, declaró Cristo a los medios.
¿Qué buscaba la reforma política?
La propuesta de reforma política tenía como objetivo transformar el sistema electoral colombiano para garantizar mayor transparencia y equidad en las campañas políticas. Entre sus principales puntos destacaban:
- Financiamiento estatal de las campañas: El proyecto pretendía reducir significativamente el ingreso de dinero privado en las campañas electorales, priorizando el financiamiento estatal con el objetivo de evitar la entrada de recursos ilícitos que han sido fuente de escándalos de corrupción en el pasado.
- Implementación de listas cerradas: Esta medida buscaba que los ciudadanos votaran por listas de partidos en lugar de candidatos individuales para las elecciones al Congreso, Asambleas y Concejos Municipales. Según el gobierno, esto habría fortalecido la disciplina partidaria y eliminado los riesgos asociados con el clientelismo.
- Reformas al Consejo Nacional Electoral (CNE): La iniciativa proponía cambios en la elección de los magistrados del CNE, manteniendo su designación por el Congreso, pero exigiendo que los candidatos se inscribieran mediante convocatorias públicas, con el fin de garantizar mayor imparcialidad y reducir la influencia política.
El rechazo a esta reforma ocurre en un contexto en el que el propio Consejo Nacional Electoral investiga la campaña presidencial de Gustavo Petro en 2022 por presunto financiamiento prohibido y por haber excedido los límites de gasto electoral en hasta 1,2 millones de dólares.
Escándalos de corrupción y críticas al sistema político
El ministro Cristo advirtió que el actual modelo político del país es insostenible y genera ciclos recurrentes de escándalos de corrupción, independientemente del gobierno de turno. “Como estamos, estamos muy mal. Y la gente tiene que entender que este sistema político es inviable. Si no lo cambiamos, estaremos presenciando escándalos de corrupción de forma constante”, señaló.
Sin embargo, la reforma enfrentaba resistencias tanto de la oposición como de sectores del oficialismo. Críticos argumentaron que las listas cerradas podrían limitar la capacidad de los ciudadanos para elegir directamente a sus representantes, mientras que otros cuestionaron la eficacia de las propuestas para combatir la corrupción y el clientelismo.
Un segundo intento fallido
Este es el segundo intento del gobierno de Petro por avanzar en una reforma política. En marzo de 2023, una versión anterior del proyecto también fue archivada tras recibir críticas tanto de la oposición como de algunos aliados del gobierno, lo que llevó al Ejecutivo a retirarla.
El rechazo de esta reforma se suma a las tensiones entre el Ejecutivo y el Legislativo, que en los últimos días también bloqueó la reforma fiscal propuesta por el gobierno. Esta reforma buscaba garantizar los recursos necesarios para el presupuesto general del Estado en 2025, pero no logró avanzar, dejando al gobierno en una situación financiera complicada.
Reformas pendientes y la estrategia del gobierno
A pesar de los fracasos recientes, el gobierno de Gustavo Petro sigue adelante con otras iniciativas clave, como la reforma sanitaria, que se encuentra en su segundo debate y es una de las principales banderas de su administración. Para acelerar el proceso, el Ejecutivo convocó al Congreso a sesiones extraordinarias de martes a viernes, aunque el ambiente legislativo sigue dividido y lleno de tensiones.
El rechazo consecutivo de proyectos emblemáticos ha puesto a prueba la relación de Petro con el Congreso y ha generado críticas sobre la capacidad del gobierno para construir consensos en un legislativo fragmentado. Tanto el presidente como sus ministros han culpado al Congreso de frenar iniciativas que consideran fundamentales para el desarrollo del país, mientras que los legisladores argumentan que algunas de estas propuestas no cuentan con el respaldo necesario por falta de claridad o viabilidad.
En este escenario, la administración de Petro enfrenta un momento crítico, en el que deberá replantear su estrategia para avanzar en sus reformas y lograr mayores acuerdos políticos. Sin embargo, las tensiones actuales dejan en evidencia las dificultades del gobierno para materializar su agenda legislativa en un Congreso que, hasta ahora, ha demostrado ser un obstáculo considerable.