El Gobierno colombiano anunció el refuerzo de la seguridad en el Palacio de Justicia, sede de las altas cortes, tras alertas de la Policía sobre posibles amenazas, especialmente hacia la Corte Suprema de Justicia, después del descubrimiento de explosivos en Bogotá.
En un comunicado, la presidencia informó que se ha incrementado la presencia de policías y militares en el edificio, ubicado en la Plaza de Bolívar, donde también se encuentran el Congreso y la alcaldía de la capital. Se han instalado equipos antiexplosivos, sistemas de vigilancia, unidades de seguridad especializadas y drones para monitorear la zona.
Las medidas de seguridad se intensificaron tras un consejo extraordinario convocado por el presidente Gustavo Petro. Diana Remolina Botía, presidenta del Consejo Superior de la Judicatura, mencionó que la policía halló maquetas del Palacio de Justicia y explosivos, lo que lleva a investigar un posible atentado.
Los explosivos fueron descubiertos en una vivienda al sur de Bogotá, gracias a información de una fuente que alertó a la policía. Durante el allanamiento, se encontraron ocho kilos de amonal, 68 cartuchos, un chaleco y otros materiales.
Además, se realizó un segundo allanamiento en la residencia de un individuo conocido como “Alarcón”, quien había sido encontrado muerto días antes y tenía antecedentes por tráfico de drogas. La policía está investigando cualquier posible vínculo con los explosivos.
El director de la Policía, general William Salamanca, enfatizó que corresponde a la Fiscalía determinar si estos materiales eran parte de un plan para atacar el Palacio de Justicia, aunque se mostró cauteloso sobre la relación con la maqueta encontrada.
A pesar de la alarma y el aumento de seguridad, los jueces y el personal continuaron trabajando. Remolina expresó su preocupación por el hallazgo, pero confió en las autoridades para garantizar la seguridad de los funcionarios, subrayando que cualquier atentado afectaría la independencia judicial.
Es importante recordar que el Palacio de Justicia fue escenario de una tragedia en 1985, cuando fue tomado por el grupo guerrillero M-19, lo que resultó en la muerte de muchos jueces y guerrilleros.