La Policía Nacional ha detenido en Estepona (Málaga) a un hombre de 37 años que presuntamente intentó quemar vivas a su pareja y a la hija de esta, menor de edad. Según las primeras investigaciones, el sospechoso conoció las intenciones de la mujer de poner fin a una relación de dos años. Después, roció a la mujer y la niña con gasolina y prendió fuego a la vivienda donde estaban, pero las dos consiguieron salir ilesas del inmueble. La autoridad judicial ha decretado el ingreso en prisión del agresor, que tenía numerosos antecedentes por violencia machista.
Según el relato de los investigadores, tras empaparlas de combustible y verter la misma sustancia dentro del domicilio con ellas dentro, el investigado arrojó una colilla que prendió fuego, si bien las víctimas lograron escapar ilesas del inmueble, siendo auxiliadas en el exterior por los vecinos y policías actuantes, ha indicado la Policía Nacional en un comunicado.
Fue una llamada al 091 de la Policía Nacional la que alertó de un episodio de violencia de género en la localidad malagueña de Estepona. Hasta allí fueron comisionados agentes del Grupo de Atención al Ciudadano, localizando a dos mujeres empapadas con gasolina en el exterior de su domicilio.
El suceso se desencadenó cuando la mujer comunicó a su pareja su intención de poner fin a la relación que ambos mantenían desde hacía dos años. El agresor reaccionó golpeando a la mujer y, después, rociándola junto a su hija con el combustible y prendiendo fuego a la vivienda con un cigarrillo.
Ante los hechos, la patrulla procedió a la detención del hombre y solicitó tanto la presencia de los servicios de extinción de incendios como de los funcionarios de la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) de la Comisaría Local de Estepona, al objeto de que las víctimas fueran asistidas por personal especialista.
Las perjudicadas, que pudieron abandonar la vivienda antes de ser alcanzadas por el fuego, fueron acompañadas por los agentes de la UFAM a un centro médico, para posteriormente presentar la correspondiente denuncia y ser trasladadas a una casa de acogida.
El investigado, sobre el que constaban numerosos antecedentes por hechos similares, fue puesto a disposición de la autoridad judicial como presunto responsable de un delito de malos tratos en el ámbito familiar. El juzgado ha decretado su ingreso en prisión.
El método empleado por el agresor recuerda al caso de Ana Orantes, que hace 25 años denunció en la televisión pública andaluza los 40 años de maltrato que vivió con su exmarido y, después, fue quemada viva por este. El relato de Orantes despertó una conciencia social y un debate público que hasta entonces no existían. Cientos de miles de mujeres se vieron reconocidas en ella. Se le puso un primer nombre: violencia doméstica. Meses después del asesinato, en 1999, se hizo una reforma del Código Penal y la Ley de Enjuiciamiento Criminal que introdujo la persecución de oficio de los malos tratos (sin que hubiese denuncia por parte de la agredida), la violencia psicológica como delito y las órdenes de alejamiento.
El teléfono 016 atiende a las víctimas de violencia machista, a sus familias y a su entorno las 24 horas del día, todos los días del año, en 53 idiomas diferentes. El número no queda registrado en la factura telefónica, pero hay que borrar la llamada del dispositivo. También se puede contactar a través del correo electrónico 016-online@igualdad.gob.es y por WhatsApp en el número 600 000 016. Los menores pueden dirigirse al teléfono de la Fundación ANAR 900 20 20 10. Si es una situación de emergencia, se puede llamar al 112 o a los teléfonos de la Policía Nacional (091) y de la Guardia Civil (062). Y en caso de no poder llamar, se puede recurrir a la aplicación ALERTCOPS, desde la que se envía una señal de alerta a la Policía con geolocalización.